Hola, Anónimo.
Ni una cosa ni otra, la verdad. Sí es verdad que existe ese mosquito que te da el empujón que necesitas para empezar, aunque previamente has debido de tener esa voluntad por plasmar en letras tu imaginación. Escribir no es algo que brote del día a la mañana, sino un sentimiento que despierta un día y que se mantiene latente ahí dentro, recordándotelo cada día que pasa.

Hola Alfonso. El tiempo es muy relativo, nunca tienes suficiente para abarcarlo todo, por mucho que tengas. Normalmente, en un año puedo tener lista una novela para su publicación, aunque depende mucho del género de la novela y de su extensión.
La siguiente que estoy escribiendo es la tercera entrega de Crónicas de Ampiria.

Hola Nando y bienvenido a esta charla digital.
Incluir tu propio "yo" en algún personaje no creo que sea malo. Es una forma de hacer tuyo a dicho personaje. Lo que sí está claro, es que ese hecho te limita bastante a la hora de hacerlo progresar, pues está atado a esas vivencias tuyas que lo conducirán hacia esa forma de ser.
Yo, desde luego, no practico esa actitud ante mis personajes. No verso en ninguno de ellos mi pensamiento, forma de ser o vivencias propias. Prefiero crear un personaje desde cero, con sus inquietudes y virtudes exclusivas, que sean solo suyas y de nadie más.

Hola Óscar. Te recomendaría cualquier libro de Julio Verne. Ese escritor fue un visionario en su época, un narrador futurista que supo mezclar historia con ciencia ficción en una amalgama única. Sus escritos son muy inspiradores, además de amenos.

Es complicado decantarse por uno de tus "hijos", la verdad. Crónicas de Ampiria es un canto a la imaginación, el despertar de mi fantasía plasmado sobre el papel. El códice Voynich, por otro lado, es mi bautizo en la novela negra, una historia que nace también de la imaginación pero que está encapsulada por los cánones de la historia.
Ambos son mis favoritos para cada género. Si tuviera que recomendar una, preguntaría antes qué género es el que más te gusta :)

Bastante más del que podría pensarse. El guion general o esquema es la parte fundamental de la novela. Tener matizado las cosas que irán sucediendo a lo largo de la novela, los sucesos principales, encuentros, lugares principales... todo eso es una labor prioritaria antes de empezar a escribir si quiera el título. Luego viene la escritura en sí, que agota bastante tiempo, para luego pasar a la tanda de revisiones, en las que cambias párrafos, añades/eliminas otros tantos, sustituyes estilos y frases y un largo etcétera de modificaciones que no parece tener término.
Con tiempo disponible y ganas, en un año puedes tener una novela preparada para su publicación. El resto de acciones ya depende un poco de la editorial y/o distribuidora con la que tengas acuerdo. Normalemente, en un mes o dos tienen listo ya todo.

Pues me administro muy mal, la verdad, jaja. Uno saca tiempo de donde puede, la verdad. Hay días que no escribes absolutamente nada y otros en los que puedes salvar un par de horas para avanzar en ese capítulo que no termina por cerrarse nunca.
Es cuestión de prioridades. Debes canalizar lo primero y más importante en tu vida cotidiana y no en lo que más te gustaría hacer. Desgraciadamente, esas dos cosas no suelen coincidir :(

Eso es aspirar a mucho por mi parte, la verdad. Soy consciente de que escribo para un círculo de lectores muy grande (los de fantasía), aunque el grupo que me conoce es aún muy pequeño. Hablar de series de televisión es algo que se me antoja tremendamente lejano, por no decir ficticio.

Yo diría que se hace, sin lugar a dudas. A lo largo de la vida, uno va adquiriendo intereses y inquietudes que despiertan sus ansias por querer leer. Ve en las letras los mundos descritos, conoce a los personajes como si estuvieran frente a frente en su habitación, se introduce en la temática de la novela como si fuera un protagonista más... hasta que al final, un día, las inquietudes se desvían hacia querer completar todos esos mundos que has leído, queriendo hacer tuyo un mundo nuevo surgido de tí mismo. Es cuando ya empiezas a plantearte lo hermoso que sería poder plasmar tu imaginación en una novela, en tu novela.

Tensión ninguna. No escribo para competir contra nadie, ni contra mí mismo. Esa pregunta se tendría que hacer a las editoriales, que son las que realmente se preocupan más de las ganancias que pueden ganar. El escritor escribe para dar a conocer su imaginación o pensamientos a los lectores.
También es cierto que algunos escritores requieren de llegar a unos cupos de venta exigidos por su editorial o por sí mismos, aunque te aseguro que no es mi caso. Yo escribo por placer de escribir, y no por ver hasta dónde puedo llegar.

Pues no, la verdad, no he tenido esa suerte. Me gustaría coincidir con Michael Crichton, que aunque es un escritor muy polemizado en cuánto sus libros, yo lo veo como un novelista muy estudioso. Todos sus argumentos gozan de unos ganchos fantásticos, y sus redacciones están muy bien medidas, con diálogos y descripciones medidos a la perfección.

No, no puedo vivir de ello (¡que más quisiera yo!)
Ten presente que para vivir de tus escritos, se deben cumplir varios puntos, entre ellos que tengas varios libros publicados, que te conozcan varios círculos de lectores afines a tus letras y que guste lo que escribes. Que seas medio-famosete, vamos, y a eso llegan muy muy muy pocos.
No me planteo llegar tan alto, la verdad, y no lo digo por falta de pretensiones ni decisión, sino por ser consciente de la realidad. La publicación de novelas está en un punto de mucha proliferación, con muchos escritos nuevos que salen al mercado a diario, muchos de ellos con muchísima calidad y fantásticos argumentos. Además, para ser un bestseller, debes tener una distribución muy fuerte de tus escritos, así como una publicidad férrea (y costosa, monetariamente) amparando tu sello personal.
Por ahora, digamos, que es un suplemento extra, simplemente eso.

Hola Saúl.
Sinceramente, Ampiria sale de la imaginación, de ningún sitio concreto o inspiración leída/vista. Me gustaría tener una historia detrás de ese nombre, pero lamentablemente no es así :( Estuve barajando varios nombres de la región, así como de las ciudades, hasta que finalmente me dije "Ampiria... si, Ampiria..."

Sería precioso poder dedicarse a escribir. Es un oficio que yo considero muy grato personalmente. Sientes que puedes esforzarte al máximo, echando horas y horas sin problemas para plasmar cada sílaba con un decoro sin igual. Es una trabajo al que sí, me encantaría dedicarme en cuerpo y alma.
Sin embargo, hay veces que no podemos escoger, y actualmente debe seguir siendo mi hobbie (al menos hasta que no pueda pagar las facturas de otra forma) :)

Hola Alejandro,
Te respondo con un rotundo sí. Para ser un escritor, previamente debes haber leído libros y más libros. No basta con tener una buena imaginación o muchas ganas de escribir, sino que también debes aprender cómo hacerlo. Debes respetar las normas de redacción y tipográficas, saber mantener el orden de los distintos capítulos y preocuparte de revisar el estilo de tus letras. Todo eso se aprende leyendo, leyendo y leyendo aún más de los grandes maestros de la literatura.
Pretender ponerse el título de escritor sin apenas haber leído libros, es como llamarse mecánico sin haber tocado un motor en toda su vida. Como mucho, eres una aprendiz.

Hola Barranco, y mucho ánimo con ese nuevo proyecto.
Mi recomendación es que seas constante en tu idea de escribir. Lee mucho, sé un amante de las letras, y vérsate en el mundillo que deseas narrar en tu novela. No quieras empezar la casa por el techo, como hacen muchos escritores noveles (y no digo que sea tu caso, ni mucho menos).

El gusto es mutuo, MarciaC.
A las librerías les está sucediendo lo mismo que al resto de comercios, y es que están siendo engullidos por un gigante llamado Amazon. Esta plataforma es como un centro comercial gigante en el que hay de todo, absolutamente de todo. Desde un libro hasta una tuerca... ahora, incluso, están comercializando productos de supermercado (comida fresca, vamos) para que la recibas en tu casa el mismo día. La facilidad de poder ver todos esos productos desde tu casita, sentadito tranquilo, es muy grande como para poder competir. Para comprar en una librería debes desplazarte a ella, buscar entre los libros, ojear entre las estanterías a ver qué hay nuevo, etc. Todo eso Amazon te lo brinda con un par de clicks, e incluso te facilita opiniones que la gente va dejando sobre el uso de ese producto. Por si fuera poco, te lleva el producto que quieras en un par de días a la puerta de tu casa, el colmo de la comodidad, vamos.
Como respuesta a tu pregunta, te respondo que sí, mucha gente prefiere comprar en Amazon en vez de en una librería. Es cuestión de comodidad y de conocimiento. Aunque parezca absurdo, mucha gente sabe cómo comprar en Amazon pero no sabe ni siquiera dónde hay una librería cerca, y los que lo saben, caen en la trampa de la librería en sí, que anuncia los tomos y las novelas que ella considera más aptas para venderse. Digamos, para entendernos, que una librería (incluso las grandes como El Corte inglés o Fnac), tú ves los libros que ellos te quieren enseñar par que compres, mientras que en Amazon tú ves los libros que los lectores consideran mejor para que tú leas (lo que ellos llaman Popularidad o Top ventas). Amazon no busca venderte este libro o este otro, le da igual, pues va a ganar de la misma forma vendiéndote el primero o el segundo.
La revolución ha empezado, sin lugar a dudas, y con la evolución de los lectores digitales como medio para leer libros, las plataformas digitales seguirán avanzando con pies de gigante. Las librerías tienen que subirse a ese carro o se quedarán desactualizadas en pocos años. Deben crearse su página web e incurrir en las ventas de ebooks y libros en papel bajo demanda, alimentando su catálogo lo máximo posible. No se trata de competir contra Amazon, pero sí de parecerse a él en el apartado de libros.

Aunque no lo creas, es algo pronto para poder responderte sin recaer en error. Inicialmente eran tres partes las que tenía en mente crear, aunque el guion creció de forma casi involuntaria hasta asentarse en una tetralogía o, incluso pentalogía. Más de 5 tomos no van a ser, eso casi que te lo puedo asegurar.
No pretendo que Crónicas de Ampiria sea una saga perpetua, no al menos hoy por hoy, sino que sea una historia épica con un comienzo y un final.

Hola Carlitos,
No es tanto cuestión de atreverme, sino de tener inspiración para atacar una novela de ese género. No me veo narrando las desventuras dramáticas en una novela romántica, entre otras cosas, porque no sé muy bien cómo enfocarlas. No soy lector de ese tipo de novelas, y por lo tanto, desconozco su composición, forma y narración correcta. Lo mismo me podría pasar con otros tantos géneros.
Por otro lado, cuentos infatiles, poesías y otro pequeño nicho, podría atacarlo con decisión. Solo falta la inspiración y tiempo.... muuuuucho tiempo :)

Hola Amparo, no desesperes en tus ánimos y sigue intentándolo. Tú trabaja en su calidad, que seguro que aparecerá la suerte que tanto ansías.
Y respondiendo a tu pregunta, decirte que muchas dificultades. Cuando eres novicio en un mundillo, das golpes a ciegas por todas partes. No tenía ni idea de lo que era un Depósito legal y cómo obtenerlo, o qué significan las siglas ISBN y cuál era su utilidad real, cómo obtenerlo, aprender a maquetar un libro y diseñar su portada... todo es una complicación apiñada, pues basta que no sepas hacer algo de eso para que te atasques. Aprender a superarlo no ha sido fácil, aunque nada que no se pueda hacer con constancia y paciencia. Empiezas mirando cosillas por internet, luego preguntas a los especialistas en la materia y te pones en comunicación con la Administración, y poco a poco vas sorteando los escollos. no son trámites fáciles de hacer, la verdad, aunque tampoco algo insalvable. Sí me gustaría hacer un llamamiento a facilitar este tipo de papeleos, para que fuera todo mucho más sencillo de realizar vía telemática, y no teniendo que personarse uno en la Administración para firmar tal papel o depositar tales manuscritos.

Hola Ross.
Lamentándolo mucho, aún no puedo adelantarte esa información. Apenas lo tenga definido y acordado, lo diré en www.ivanincerti.com

Escribo en ordenador de mesa, aunque me gustaría más poder hacerlo en portátil, claro está, pues te da la libertad de sentarte en cualquier sitio y no obligatoriamente en tu despacho.
Como programa uso el Word. Probé un par de aplicaciones que circulan por ahí de escritura, como el Stilus, pero al final, lo más práctico para mis intereses ha sido usar lo que mejor conozco.

Prefiero un libro impreso, sin lugar a dudas. Los libros electrónicos dan salida a una necesidad muy demandada hoy en día, que es la comodidad de poder transportar cientos de libros en un aparato del tamaño de la palma de tu mano. Puedes estar en el autobús, almorzando en un parque o esperando tu turno en el dentista que puedes, perfectamente, abrir el libro y empezar a leer, pues lo llevas siempre ahí encima, en tu móvil, tablet o kindle.
Los libros físicos, sin embargo, requieren de más espacio y son menos "movibles", aunque tienen a su favor la sensación inigualable de su tacto y su olor. El poder pasar las páginas mientras las sientes entre tus dedos y el notar el peso del libro sobre tus brazos es un punto único.

Una novela no es secuencial en sus capítulos, rememorando en muchos de ellos partes pasadas que -de alguna forma- explican el proceso actual que están viviendo los protagonistas. Faltaría mucho por explicar, muchos pasajes pasados, como la juventud de cada uno de los protagonistas y en cómo se convirtieron en lo que son actualmente, pero no siempre puede uno insertar dicha historia sin resultar desacertado.
Con todo ello, quiero decir que los capítulos deben guardar relación hacia un mismo objetivo, y no se trata de relatar lo primero que a uno se le ocurra. Esa es la razón por la que ese pasaje que dices puede o no puede tener cabida, dependiendo de si en la novela se aplica que se explique. De lo contrario, resulta una espina molesta en el argumento más que una ayuda.
Eso sí, ese tipo de dudas quedará explicada en futuras novelas (aunque no sean de la saga, pero que sí expliquen la misma) o en entradas que haga en el blog oficial www.ivanincerti.com
Gracias por tus felicitaciones Rosendo. Celebro mucho que te esté gustando tanto la novela.

Es complicado responder a esa pregunta, pues basar la calidad de una novela por un punto concreto no es algo sencillo de aplicar. El brillo de una novela se aprecia en cómo el escritor ha cuidado la narración y los diálogos, metiéndote en escena sin resultar ni cansino ni insuficiente. Los capítulos deben transmitirme un movimiento firme y con tensión, animándome a seguir leyendo más con ganchos y finales (de capítulos) hábilmente introducidos.
Una novela es un conjunto de aportaciones que hace el escritor, conformando un hecho que nos puede deslumbrar o pasar desapercibida.

Hola Anónimo,
Sí, es un pensamiento que ha rondado por mi cabeza un par de veces, aunque me encuentro con un par de escollos que me bloquean antes de seguir. El primero, y más importante, es que si intento hacerlo yo, consumiré muchísimo tiempo, un tiempo muy preciado con el que podría estar alimentando nuevas creaciones.
Podría contratar a alguien para tal labor, naciendo el segundo impedimento grande: el coste de la traducción, que no es nada económico. Entiendo perfectamente que la labor de un traductor es complicada, muy complicada, y entiendo perfectamente el coste que piden para llevarla a cabo, de la misma forma que entiendo que no puedo afrontarlo.
Así pues, si lo traduzco yo, dejo de crear futuras creaciones, y ponerlo en manos de un traductor me sale demasiado caro. Un camino sin salida, como puedes ver, aunque incluso en esos términos puede uno tener suerte y encontrar un sendero apartado asumible.
Esperemos algún día poder afrontar esa traducción al inglés.

¡Menuda pregunta, Marta! Jaja.
Supongo que con Shania, el símbolo de la picardía, la belleza, la seducción, el diálogo mundano y sencillo, y alguien con la que es fácil de conversar y mantener una relación.

Hola Miguel. Lo cierto es que no me ha pasado muchas veces, o al menos no durante mucho tiempo. Si he tenido bloqueos, han sido efímeros, de escasos minutos. Suelo tener un esquema de sucesos establecido con mucha anterioridad antes de afrontar cada capítulo, y aunque sí te puedes quedar bloqueado mientras estás describiendo determinado pasaje o expresando un diálogo relevante, al final lo he logrado sortear con bastante celeridad.
Otra cosa son las revisiones, que ahí sí que vas tropezando una y otra vez con la misma piedra. Ves un párrafo, lo eliminas y sustituyes por otro que crees que está mejor, y en la siguiente revisión sigue sin gustarte y vuelves a modificarlo. Así te puedes quedar una y otra vez, hasta más de 6 veces modificando el mismo pasaje. Es una forma de bloqueo casi tan molesta como quedarte en blanco, la verdad.

Hola Rosa. Aún es muy pronto para saber cuándo estará listo el siguiente volumen de la saga, aunque en la web oficial (www.ivanincerti.com) os iré informando de su evolución.
En Argentina estará disponible de forma muy rápida a través de la plataforma Amazon. Podrás adquirirlo tanto en su versión digital como en papel físico.

Pues es algo que sucede sin más. Soy de ciencias, sí, pero eso no significa que desprecie las letras (todo lo contrario, para ser justos). Para escribir te debe gustar leer, no hay más misterio. Si gozas leyendo y devorando esas historias escritas por tus escritores favoritos, estás en la casilla de salida para dejar también tú tu huella. No depende de si eres informático u obrero, sino de que te surjan esas ganas de hacerlo y que estés preparado para tal labor.

Hola Antonio, saludos desde Málaga.
Si te soy sincero, la respuesta es un rotundo no. Los personajes ganan su caracterización y sentimientos por sí mismos, y no por semejanza con alguien que yo conozca, no al menos que yo sepa de forma consciente. Me gusta moldear cada personaje con su propia plastilina, haciéndose único y exclusivo.